Nehemías fue uno de los grandes líderes después de que los exiliados judíos regresaron a Judá. No sólo organizó el proyecto de reconstrucción del muro de Jerusalén, sino que estableció un nuevo gobierno en Judá para ayudar a organizarlos como nación. Todo comenzó en el palacio de Shushan, en la tierra de Persia, donde Nehemías trabajaba como portador de copas para el rey Artajerjes.