Noah se paró en la puerta del arca, esperando que la gente se uniera a él a bordo. “¿Nadie aceptará la invitación de misericordia de Dios y encontrará seguridad en el arca?” él gritó. “¡Una terrible inundación está en camino! ¡Únase a nosotros a bordo ahora antes de que sea demasiado tarde!
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